Dominicas de la Sagrada Familia en Teror

Ante las revueltas políticas relacionadas con la guerra de Cuba (1895) se traslada el Noviciado de las Dominicas a Teror. Los aires de la montaña favorecen la salud de las hermanas y se decide comprar el lugar llamado "La Montañeta" para crear su residencia.

El edificio, de estilo neorrománico, se inaugura en 1925.

En 1926, un ala del convento se destina a internado. Allí se educa a niñas y jóvenes del archipiélago y se acoge en las clases, a alumnas del pueblo. Más tarde, pasa a ser un centro concertado para alumnado de ambos sexos y lleva a cabo su labor educativa hasta el año 2020.

Entre los años 1988 y 2000, una vez el Noviciado se traslada a la península, se ejecutan las obras para transformar el espacio en "Casa de Espiritualidad". Desde entonces, ofrece sus servicios a grupos que buscan un lugar propicio para el silencio, la oración, el estudio y la convivencia.

Actualmente, la Comunidad está formada por hermanas que acompañan y animan el día a día del lugar.


«… es un vasto conjunto que reproduce a maravilla la traza de una vieja abadía del siglo XIV. Es un alarde de buen gusto, de hábil técnica de construcción arcaica que honra a su director, que ha hecho hablar a la piedra como los grandes arquitectos de los tiempos remotos. A la fábrica altiva y serena como una abadesa de sangre real, le han puesto un tocado campesino de tejas bermejas…». 

González Díaz, Poeta.
Laureano de Armas y Gourié, Arquitecto.

Dominicas Misioneras de La Sagrada Familia